La semana pasada acudí con gusto al taller de microrrelatos organizado en la universidad Carlos III. El taller estuvo a cargo de Santiago Eximeno, al que conocía de vista y pude conocer mejor. La lección fue interesante, sobre todo por las posibilidades de este formato y no sólo por su brevedad, tan apropiada para los estresantes tiempos modernos, sino para ser escuchado y recuperar la literatura oral, algo que resulta tedioso con los relatos más largos y no digamos con la novela.
Aquí os dejo una imagen del terrorífico Eximeno. No he leído su libro "Bebés con cuchillo", que está listo en mi estantería, pero no neguéis que un poquito de miedo sí que da...
Aquí os dejo una imagen del terrorífico Eximeno. No he leído su libro "Bebés con cuchillo", que está listo en mi estantería, pero no neguéis que un poquito de miedo sí que da...
Durante la clase escribí este pequeño microrrelato. Lamentablemente no estoy acostumbrado a hablar ante tanto público, así que para vosotros queda:
EL ANILLO
Cuanto sus amigos le habían dicho era cierto. Al ponerse el anillo desapareció de la vista de todos. Iba de un lado a otro sin que advirtieran su presencia. Miró entonces el precioso y dorado anillo en su dedo y recordó que también le habían dicho que nunca podría quitárselo, que no resistiría su poder...
-¿En qué estás pensando ahí tan callado?
-En nada, mi tesoro, de verdad... -respondió, asustado. ¡Luego era cierto! ¡Sería invisible para siempre! ¡Jamás tendría la voluntad suficiente para quitárselo!
-Entonces deja de estar pensando en las musarañas y ven aquí, que es nuestra boda y quiero presentarte a unos amigos.
-Ya voy, mi tesoro, ya voy...-¿En qué estás pensando ahí tan callado?
-En nada, mi tesoro, de verdad... -respondió, asustado. ¡Luego era cierto! ¡Sería invisible para siempre! ¡Jamás tendría la voluntad suficiente para quitárselo!
-Entonces deja de estar pensando en las musarañas y ven aquí, que es nuestra boda y quiero presentarte a unos amigos.
4 comentarios:
...está bueno tu experimento xD. Normalmente, este género no me atrae bastante. Sin embargo, hace poco me topé con una colección muy buena, de Alejandro Jodorowsky, "El Paso del Ganso", que contiene microrrelatos de bastante calidad. Por poner un ejemplo:
El Último hombre
El último ser humano vivo lanzó la última paletada de tierra sobre el último muerto. En ese instante mismo supo que era inmortal, porque la muerte sólo existe en la mirada del otro.
Hola, Giliath,
Pues este microrrelato que dices me parece que lo había leído en alguna parte pero no sabía que era de Jodorowsky. Mmm... me parece que alguien se apropió de él.
En el taller también nos hablaron de colecciones de microrrelatos. Tengo que hacerme con alguna.
Me encantan los microrrelatos. Resultan ser un fiel retrato de cómo evolucionan nuestras habilidades cognitivas: cada vez queremos las cosas más breves, más impactantes. Un microrrelato te ahorra toda la parafernalia y te lleva al centro de la cuestión de golpe y sin avisar. Tú te imaginas el resto.
No digo que no me guste leer libros, al contrario. Pero a veces una historia larga tiende a masticarlo todo para el lector (en mayor o menor medida), mientras que el microrrelato le causa impresión y le lleva a reflexionar y a imaginar.
Creo que, además de un género por derecho propio, es un magnífico ejercicio narrativo.
Llevo casi medio año sin actualizar mi blog, por cierto. Se me rompió el ritmo en un mes de exámenes y no he vuelto a recuperarlo. Ya os cogeré envidia y volveré.
Un placer leerte de nuevo!
el tema de los microrrelatos da la sensación de ir cogiendo cada vez más fuerza y parece lo más normal del mundo en los tiempos que corren, Dostoyevski se nos moría de hambre a día de hoy señores, jajajaja.
dicho esto, tu micro está muy bien, yo hubiera añadido algo referente a que una vez que te pones el anillo de poder te vuelves asexual jajaja.
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